Elena no es una mujer hermosa, lo que no quita que tenga una preciosa sonrisa, esté casi siempre alegre y sea agradable.
Marcos no es un hombre sociable, pero es amable y atento, sabe escuchar y suele dar buenos consejos.
Hoy Elena y Marcos se han conocido. Elena piensa que Marcos es antipático, soberbio, bastante soez y un poco machista. Marcos piensa que Elena es una cotorra egoísta, una insufrible maniática quisquillosa cargada de prejuicios con la ira fácil y además chillona.
Y todo por culpa de andar con prisas, los dos, y por escuchar al mismo periodista radiofónico que no hacía más que enervarlos, irritarlos y provocar una comprensible ira justiciera.
Además de confundir la luz ámbar del semáforo con la luz verde, los dos.
Si es que en el fondo tienen bastante en común.
Nos leemos...
Me ha gustado mucho leer esto. Yo he pensado esto mismo varias veces y me he sentido muy identificado, lo has expresado de puta madre :)
ResponderEliminarSi no te has dado cuenta no nos hemos conocido en un semáforo.
ResponderEliminarGracias por la bonita sonrrisa
si esas dos personas se hubieran conocido en una situación diferente a lo mejor la historia hubiese sido romántica.
ResponderEliminarme gusto tu relato de "ni la sombra",precioso,me he sentido muy idenfificada con ese escrito. creo que es de lo mejor que te he leido.
ResponderEliminarmi historia es mas diferente, lo unico que coinside son los nombres.
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